Noches de verano🌙

Ya he vuelto a Zaragoza. Volví ayer, desgraciadamente.

El verano ha terminado en cuanto a mis vacaciones se refiere, y hoy no he podido evitar pegarme el día vagueando, pensando en que ahora empieza un nuevo año y parece que hoy era el día de recargar las últimas pilas.

Recordando el verano, las fiestas, los bailes, las tapas, los baños, las risas e incluso los llantos, porque sí: ha habido llantos entre tanta alegría, me doy cuenta de que muchas veces pierdo los días esperando uno nuevo, sin darme cuenta de que cada dia merece ser el esperado. No sé si me explico.

Me pego el año esperando las vacaciones, Septiembre esperando mi cumpleaños, Octubre esperando pilares, Diciembre la Navidad... Y así siempre. Y no me doy cuenta de los días que pierdo esperando y que cuando pasan me quedo como... Vacía. Como que, sí, toda la espera ha servido de mucho porque ha ido todo como quería, pero que en el camino he perdido cosas muy guays también. Y me entristece un poco.

¿No os ha pasado nunca?

Igual esto es lo que llaman 'depresión post vacacional', o igual es que, simplemente, se me va la cabeza como de costumbre y desvarío.

El caso es que aquí estoy, esperando que llegue el sábado. De nuevo. Esperando. No aprendo.
Bueno en verdad estoy esperando a que mañana no me atraviesen demasiado el brazo con una aguja de calibre 33 para desangrarme mientras me desmayo lentamente esperando a que pase el mal rato. Y otra vez. Esperando.

No esperéis ser felices. Sed felices.
Buenas noches
N. 🌙

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